viernes, 18 de agosto de 2017

¿?

DIARIO

Estoy intentando averiguar quién soy. Sé donde estoy, que es lo que hago, quienes me acompañan, incluso sé lo que quiero hacer en el futuro. Pero quién soy.


En este momento estoy dentro del paraninfo, abajo de los murales recién restaurados de Orozco. Un lugar muy pacífico, es de tarde y no hay nadie en la sala. Nunca la había disfrutado así. Sola, sin ruido. A pesar de que el tráfico y todos los ruidos de la ciudad están a unos metros, no escucho nada más que un piano de fondo y una voz de alguna grabadora que explica alguna exposición temporal del museo.

Últimamente he tenido una sensación extraña de vacío. Y digo extraña, porque ya he experimentado el vacío y la soledad de una manera en la que me molesta y me destruye. Esta vez es completamente diferente. Me encuentro vacía pero no es doloroso, ni causa ninguna sensación negativa. Es más bien, tal vez, curiosidad. Curiosidad en cómo se llena el vacío o curiosidad por saber si este es un estado permanente y normal. No me molestaría ni una cosa, ni la otra. Sólo tengo deseo de saber, quizá averiguando, la curiosidad termine y no experimente entonces ninguna sensación.

Hacía mucho tiempo que no estaba en este lugar y creo que es la primera vez que me encuentro en este lugar en este estado. Recordaba la sala más grande y los murales menos saturados. Normalmente cuando observo, leo o escucho algo, me siento identificada (o no) con los sucesos relatados. No en su totalidad, pero siempre hay algún rasgo, párrafo o estrofa en la cual se relata algo que asocio con algún acontecimiento que he vivido o algo que creo conocer. En esta ocasión, me siento obligada a identificarme con algún personaje de algún mural. Son muchos, todos muy variados, desde la posición social, hasta las marcadas expresiones. Los he observado a todos, uno a uno, hasta los que no son nítidos del todo, o sólo sobresale alguna parte de su cuerpo. No me encuentro. Busco y analizo nuevamente a cada uno, hago énfasis en la multitud y, después de tanto buscar, ahí estoy. Me encuentro en el primer plano, soy la figura más grande del mural frente a mí, ahí siempre estuve, con los ojos vendados, sentada, en una posición que no se qué es lo que refleja realmente, quisiera decir que calma pero, el personaje se encuentra en una posición tal vez no muy cómoda y el puño, según yo, tenso, será porque se está recargando, no lo sé realmente. ¿Por qué soy yo la única figura con los ojos vendados? No es que no me de cuenta de lo que está ocurriendo, es que no sé quién soy, ni cómo puedo participar.



                                 

* Fotos tomadas con el móvil